BIEN HOY LES TRAIGO UN ARTICULO QUE ENCONTRÉ EN LA PAGINA www.empareja2.es Y PUES ME PARECÍO BASTANTE INTERESANTE, SE LOS DEJO.
Ponte en situación: una pareja se rompe. Uno de los dos desea poner punto final a la relación y lo consigue, en algunos casos más difícilmente que en otros. La persona abandonada pasa por una etapa de confusión, posteriormente, una etapa de negación, y seguirá experimentando etapas de rechazo, odio, tristeza y olvido, por lo general en ese orden.
Antes de que el abandonado experimente las dos últimas, la tristeza y el olvido, hay demasiados sentimientos encontrados, y es el momento donde éste desea que la relación vuelva a tomar forma. Es el momento en que la dependencia afectiva toma cuerpo, en el que hay muchísimo dolor por la ruptura y se derivan numerosos problemas de la separación: amigos, familia, lugares comunes…
Pues bien, ésta es la etapa en la que el dolor puede pervivir durante un tiempo indefinido, siempre y cuando la esperanza de regreso se alimente de forma indefinida. En empareja2.es hacemos lo posible por evitar el contacto, fomentando el contacto cero y, de esta forma, no prolongar una ruptura que conlleva de forma inherente un gran dolor. Sin embargo, muchas veces es imposible. La persona que ha desaparecido o bien tiene un deseo irrefrenable de contactar con su ex… (cosa que aconsejamos inútil, aunque no obligamos a que nadie haga algo que no desea)...
… o bien es contactado por la ex pareja.
Y es aquí donde nuestro famoso término, el tanteo, cobra protagonismo. La ex pareja contacta contigo con la única intención de RESTARSE CULPA, DE CONTACTAR CON LA PERSONA CUYO ENTORNO AÑORA, DE SABER QUÉ ES DE TU VIDA... pero sin ninguna otra intención. No intentan, como creen algunos, retomar la relación… o disculparse por lo ocurrido… o hacer ver que sienten algún tipo de arrepentimiento... Sólo necesitan sentirse bien, porque quizás les puede la nostalgia, añoran su anterior vida, sus amigos en común, sus horarios, su zona de entrenamiento... y, entonces, llaman. No para volver con una ex pareja a la que han dejado porque se les acabó el amor. Llaman porque no soportan la idea de haber perdido tantas cosas y, muchas veces, dudan de si ese salto les puede dejar sin el amor de la persona a la que llaman que, repetimos, cortaron con ella para no volver, pero no desean que haga su vida porque les da miedo quedarse totalmente solas.
Lo que ocurre cuando una persona deja a otra, y ésta desaparece para comenzar a recuperar su autoestima y su fuerza interior, es que la persona que abandona comienza a hacerse preguntas del tipo: ‘¿Por qué no me contacta? ¿Se estará olvidando de mí? ¿Y si ha empezado a salir con otra persona?'
Y esto es como la vieja máquina de videojuegos que te regalaron tus padres hace muchísimos años. Una máquina que no usas y la tienes guardada en un cajón. Y cuando otra persona te dice: ‘oye, ya que no la utilizas, regálamela que saco una pasta por ella en eBay’… entonces cobra un valor INESTIMABLE. Y si esa persona coge prestada la máquina, sin tu permiso, entonces movemos tierra, mar y aire para recuperarla.
¿Sentirte como una vieja máquina de videojuegos, que sólo quieren recuperarte si creen que van a perderte? Bueno, el ser humano que no es autodependiente se vuelve codicioso con lo que no tiene. Y en las relaciones humanas, por desgracia, también ocurre esto: una persona toma valor si su ex pareja piensa que puede perderle. Ya sea estando en la relación o habiendo cortado.
Existe un pre-tanteo, antes de romperse la relación. Tu pareja se muestra distante y fría, tú se lo reprochas... y, entre ‘acto y acto’, esa persona envía poderosos mensajes de amor. ¿A qué viene esto? Bueno, eso sucede en muchas personas que está a punto de dejar a otra. En las personas dependientes se da aún más, dado que desean mantener el hilo emocional que las tiene atadas a la persona con quien salen, para sentirse queridas y valoradas. ¿A qué se debe esto? A que desean mantener enamorada a la persona a la que van a dejar, haciéndoles leer una y otra vez esos SMS llenos de amor y pasión. Esto sólo demuestra que están valorando a la persona a la que tanto han querido, pero a la que YA NO AMAN. Eso es lo importante, que hablan de lo mucho que quieren porque saben que la relación está a punto de romperse, y contrarrestan esa pérdida de amor con efusivas demostraciones de cariño... distante.
En el caso de haberse dado ya la separación, el tanteo toma la misma función: informarse de cómo te va en la vida. Comenzará enviando algún e-mail en cadena, incluyendo a todos sus amigos. Si no respondes, seguirá con el envío de algún e-mail personal, preguntando qué tal va todo. Si te va bien, empezará a estrechar el contacto: alguna llamada, enviará a algún ‘emisario’ para saber de ti… incluso algún SMS nocturno del tipo ‘hoy me he dado cuenta de que empiezo a perderte y no hago más que llorar’.
¿Contienen algún tipo de verdad esos tanteos? Sí. Repetimos algo importante: la persona que decide cortar y no sabe responsabilizarse de su nueva situación, porque quizás en su nueva relación su pareja le prohíba hablar de su ex, comienza a añorar lo que tenía y se le hace muy duro el soportar la ruptura sin tener el apoyo de alguien. Entonces, aparecen esos tanteos tan dolorosos.
¿Qué hace una persona, que aún tiene reciente el dolor, cuando su ex le contacta? Pues que piensa: ‘ah… por fin… estaba deseando que volviera, ¡fantástico! ¡Volvemos a estar juntos!' Y... ¿qué hace la otra persona cuando el abandonado se muestra, de nuevo, accesible? Pues que retira todo el interés y le dice algo así como: ‘quería saber de ti, pero por favor, sólo quiero que sepas que sigo con algo de dolor por lo que ha pasado y necesito un tiempo para aclararme’.
Por ejemplo, una persona que deja a otra sufre su duelo, no se siente comprendido por su nueva pareja, tiene un día de nostalgia y contacta con su ex diciéndole 'hoy nos tocaría ver ese partido juntos. Te echo de menos aunque no lo creas. Besos'. Entonces, la persona dejada contacta, le dice algo así como 'De verdad, podemos seguir juntos y ver ese partido, no dudes en que estoy aquí para ti'... Y, ¿qué hace la persona que dejó y que ya se había desfogado al enviar el tanteo? Asustarse por la reacción desmedida de su ex, y retirar de nuevo las naves diciéndole 'Aún estoy mal, hablamos pronto, besos'.
Es el ejemplo perfecto para darse cuenta de que una ex pareja que contacta necesita hablar de su malestar con alguien de confianza, si es posible con su ex quien tanto le entiende.
Primeros momentos post-ruptura
Durante los primeros momentos tras la ruptura, una persona se aferra a todo lo que le une a aquello que ha perdido. Por eso mucha gente se empeña en mantener conversaciones con su ex, aun cuando le está doliendo saber de esa persona, escudándose en cualquier pequeño gesto como indicativo de que quiera volver. Además, llevados por consejos ERRÓNEOS utilizan la indiferencia para demostrar a su ex que ya están recuperados y que les da lo mismo lo que hagan, todo con el fin de provocar una reacción, con la esperanza de que se dé cuenta de lo superado que tienen el duelo, hacer que piensen que puede haber otra persona... y que comience a plantearse volver.
En empareja2.es aconsejamos indiferencia para EVITAR UN SUFRIMIENTO ESTÉRIL, NO PARA VOLVER CON UNA EX PAREJA. Si enfocas todo nuestro esfuerzo en hacer que vuelva, jamás te recuperarás al mantener una denodada dependencia hacia dicha persona. Eso sólo significaría que si no vuelve, estás mal, así que sigues haciendo lo imposible para que vuelva… incluso mostrar arrogancia aunque esto cambie tu personalidad.
empareja2.es aconseja mucha disciplina en un contacto cero, en una desaparición ya sea física y/o afectiva. Hay que actuar como si esa persona no fuese parte de tu vida. De hecho, una ex pareja lo quiere así. Porque si una persona te quisiera lo más mínimo no dejaría que lo pasaras mal.
Si una persona te quisiera lo más mínimo, no pediría un tiempo (el amor no entiende de ‘tiempos’).
Si una persona te quisiera lo más mínimo, no llamaría y, al escuchar un ‘por favor vuelve’ (gran error tuyo, por cierto) respondería algo así como: ‘quiero que hagas tu vida, no esperes nada de lo que hubo, lo nuestro terminó’.
Si solicitas ayuda en empareja2, conseguirás un contacto cero perfecto. Y ese contacto cero es aquel que hace pensar a una ex pareja las preguntas referidas anteriormente: ‘¿qué pasará que no me llama? ¿Se habrá desenamorado? Si llega a este punto y se mantiene una actitud de desaparición, de vida plena, es posible que la ex pareja busque algo más que una llamada. Un contacto… y decida quedar. ¿Y qué sucede en esta cita? Pues que la persona que ha abandonado se muestra de forma lamentable. Muestra una cara apática, si piden algo para tomar apenas tiene hambre, mira desangelada a su ex…
Así que pasan la tarde… la noche… y más y más noche. Y sí, se acuestan y aquello parece el reencuentro celestial, resonando violines por todos lados. Y en un momento de sopor y delirio sexual, el dejado dice: ‘todo este tiempo desaparecido… no he parado de pensar en ti’
ÑÑIICCCCCCCCC, se oye un scracth de disco.
La persona que abandonó dice: ‘creo que ha sido un error hacer esto… lo siento… sigo sin saber lo que quiero... no sé qué me pasa... no sé por qué hago esto ni sé por qué te hago sufrir. Espero que me perdones.’
Y, frente a la visión atónita del (otra vez) abandonado, se viste, le besa en una mejilla y se va. Sin mediar más palabra.
Éste es el tanteo de más contundencia, el de mayor nivel. Comenzamos con un e-mail en cadena sin mensaje alguno, y hemos llegado a un polvo post-ruptura que deja totalmente fuera de juego al participante. Ha caído en la trampa y la ex pareja se lleva lo que necesitaba: saber lo que el otro sentía, saber que sigue ahí, y que toda la desaparición que ha llevado a cabo no era más que una farsa de la que él mismo ha renegado ('te confieso que había desaparecido para recuperarte'... ¡qué error confesar algo así!)
Así que esta persona que había desaparecido de forma tan errónea piensa: ¡voy a desaparecer de nuevo!, quizás funcione... Pero.. ¿volver a desaparecer? ¿Para qué? Su ex pareja ya sabe que no se trata más que de una pueril 'técnica' (en empareja2 no hay técnicas... ni creemos que en el amor deba haberlas), que ha conseguido desarmar con alguna cara larga y su evidente poder sexual.
Para evitar llegar a este punto, en empareja2.es aconsejamos no hacer caso a absolutamente ningún tanteo. Ni siquiera a los mensajes de dolor, ni a las llamadas con lágrimas. Si una ex pareja se interesa en la vida de su ex, hay que pensar que durante mucho tiempo, quizás años, supo donde vivía. Sabría dónde localizarle. Si ahora quiere lo mismo, no tiene más que llamar a la puerta, incluso tirarla abajo si es preciso. Pero que nadie crea que porque su ex le esté acosando con mensajes ‘super emotivos’, signifique que quiere volver. Sólo quiere desembarazarse de su sentimiento de culpa y su nostalgia.
Como se suele decir en España: ‘quien quiera peces, que se moje el culo’. Qué menos que llamar a la puerta de la persona a quien quisiste, para hablar y pedir perdón… en lugar de mandar mensajitos al móvil o, más tristemente, al blog (o similares).
¿Qué hacer ante los tanteos?
Entonces… ¿no hay que hacer ningún caso a los tanteos de una ex pareja? Bueno, mientras no sean contundentes, reales, donde se vea la intención, donde se desborde la necesidad… No, no lo hagas. Es una manera de demostrar que una persona no puede jugar con los sentimientos de nadie. A este respecto, en empareja2.es solemos argumentar la teoría del ‘asalto de los orcos’:
Pongámonos en la típica batalla de película mítica, tipo El señor de los anillos. En ella se ve la clásica escena de los buenos encerrados en una gran fortaleza, y una horda de orcos salvajes aproximándose por el horizonte. Así que el guardián de la torre avisa al poblado:
- ¡Pueblo! ¡Se acerca una horda de orcos! No sabría decir cuántos son… quizás 2.000… o 3.000 orcos…
- ¿Vienen armados?
- No, vienen ligeros.
- Intentaremos sostener su ataque…
Así que llega la noche y los orcos arremeten contra el castillo. Van provistos de sables y algunos cientos de lanzas. Pero desde la fortaleza se les rechaza a la perfección: desde las ventanas saeteras se elimina a las primeras filas de las hordas; desde las torre se lanzan peñascos. Gran parte de los orcos muere en la contienda y se retiran.
- ¡Guardián! ¿Se retiran?
- Sí… se retiran… pero… permanecen en el horizonte…
A las pocas horas…
- ¡Pueblo! ¡Los orcos! ¡Les apoyan nuevas hordas! Son… ¡son más de 5.000! ¡No podremos contener a tanto orco!
- ¿Van armados?
- Si… llevan escaleras… y tres catapultas… ¡qué haremos!
- Tranquilos… ¡fortificad las torres y sacad todos los escudos de los talleres de la ciudadela!
Llega la noche… los orcos llegan en una potente oleada, furiosos, bramando desde el horizonte. Muchos de ellos ascienden hasta la fortaleza a través de las escaleras; la fortaleza acaba con muchos de ellos vertiendo aceite hirviendo y bolas de ropa ardiendo. Otros son eliminados una vez dentro de la fortaleza. Y… una vez más, los orcos se retiran.
- ¡Se retiran, señor! Pero desde hace unas horas veo cómo han llegado más orcos. Vuelven a situarse en el horizonte y esta vez cargan torretas, más catapultas y dos o tres mil orcos más. ¡Es una locura!
Y, al llegar la noche, nuevamente, los orcos atacan la ciudadela fortificada. Ni las torretas, ni las ventanas saeteras, ni el aceite hirviendo acaban con la ambición de los orcos por conseguir penetrar en la ciudad. Las torretas de asalto hacen llegar a cientos de orcos hasta los muros centrales; las torres acaban sin sus guardianes al ser destruidas con las catapultas. Muchos perecen en la contienda. El ataque ha terminado.
Bueno, sin querer entrar en más detalles novelísticos, lo que debe quedar claro con este ejemplo es que PROHIBIR ES HACER DESEAR. Si alguien desea algo y se le prohíbe, lo intentará una y otra vez hasta conseguirlo. En este caso, se repelió el primer y el segundo ataque… hasta que llegaron varios miles más y lo consiguieron.
En base a esto, ¿qué ocurre si rechazas un primer contacto de una ex pareja? Que vendrá con más fuerza. ¿Y si rechazas un segundo ataque? Quizás haya que hacerlo con tacto, sin cerrar por completo la puerta… pero, desde luego, no dar el sí definitivo. El objetivo es que una persona demuestre su verdadero interés, y no te haga perder el tiempo.
NO DESARROLLES UN ORGULLO MAL ENTENDIDO, NO VAYAS CON ACTITUD SOBRADA; SIMPLEMENTE, QUE LA OTRA PERSONA SEPA QUE NO ESTÁS PARA PERDER EL TIEMPO.
¿Significa esto que hay que valorar un tanteo? Bueno, lo cierto es que si tantas veces ha contactado por algo es... y se le puede dar una oportunidad. En este caso ya no sería un tanteo, porque un tanteo es un contacto hecho desde el miedo y no desde el amor. Quizás, cuando se realiza desde el amor, las cosas son diferentes, y es necesario hablar. Pero no aceptes un contacto a la primera. Quizás pienses: ‘Pero… ¿y si le rechazo en un primer contacto y ya no vuelve?’ Bueno, evidentemente si una persona hace eso es que MUY POCO TE QUERÍA. Muy poco. Porque si por un contacto frustrado hace que su orgullo valga más que lo que pueda quererte, es para no querer tener cerca a esa persona.
En empareja2.es recomendamos el contacto cero, sobre todo ante un posible tanteo, siempre que el tanteo sea eso, TANTEO. La forma de saber si sólo es un tanteo es permanecer en silencio, sin dar importancia a un mero contacto por móvil o a través de Internet. Dejemos que sea en persona cómo quieran resolver la ruptura, igual que era en persona cómo se desarrollaba la relación.
Para ayudar a este propósito, esta red social posee una lectura: ‘frases para decir cuando te llama una ex pareja’ que instruye de forma cómica sobre la forma de actuar ante un tanteo, ya sea a través de e-mail, teléfono o en persona. Reconocemos que es complicado no venirse abajo ante una llamada, aunque este carente de valor. Reconocemos que es casi imposible permanecer firme ante las lágrimas de la persona a quien amamos. Por eso, para constatar que una persona ‘llama a más orcos' para que su ‘ataque’ sea más potente, se debe ignorar su forma de tantear el terreno, haciendo TU VIDA, RELLENANDO TUS HUECOS, TENIENDO POCOS O NINGÚN MINUTO DISPONIBLE.
La única forma de ser atractivo y no ser dependiente es tener una vida plena. Si no la tienes, normal que caigas en las redes de la dependencia, y que un tanteo te haga moverte en dirección hacia tu ex pareja.
Consideraciones finales
Un usuario de la página nos comentaba que mejor sería no coger el teléfono, en lugar de ‘hacerse el sueco’. Bien, puede que despachar un tanteo con una excusa no sea real... pero es una actitud NATURAL. Y lo harías para que vea que sigues con tu vida y otras cosas que te ocupan, no resentido mirando el teléfono de reojo, mientras suenan los tonos, incesantemente.
¿No cogerle el teléfono, aunque suenen tonos, ES NATURAL? Lo que deberías tener muy claro es que no responder la llamada de una persona que en su día quisimos, obviamente suena a despecho o, peor aún, a cobardía. Enfrentarse a una llamada es una muestra de respeto (contestar un mensaje o una perdida es una niñería). Y, además, contestar una llamada es enfrentarse al objeto que te hace daño, que es la ex pareja, para sobreponerte de forma óptima. Despachar una llamada así rápidamente, con educación, con un 'mira, ya hablamos en otro momento que me pillas a punto de entrar en una reunión', es una forma de decirle ‘no estoy para pérdidas de tiempo’.
Sólo así conseguirás que une la desaparición te fortalezca, que una persona sepa que tú vida es importante y no puedes malgastarla con estúpidos tanteos... y que si realmente desea algo no será esa vía la que debe utilizar.
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